jueves, 21 de abril de 2011

Complicada enfermedad ataca al fútbol colombiano





El panorama del fútbol profesional colombiano, en lo laboral, es cada vez más complejo. El no pago de los salarios y otras de las obligaciones contractuales de parte de algunos clubes ha desatado una nueva crisis en el torneo rentado del país.


Por: Roosevelt Castro B.


La crisis que vive el Deportes Quindío puso en jaque al fútbol profesional colombiano. El no pago de varias quincenas a los jugadores del “cuadro Cuyabro” derivó en que el equipo profesional no viajara a Bogotá el pasado fin de semana y en su defecto lo hiciera un grupo sub-20, que cayó derrotado 5-0 ante Millonarios, resultado que agravó la enfermedad del elenco de Armenia e hizo metástasis en otros clubes.


Por parte de Coldeportes Nacional se le entregó al Quindío un acto administrativo para saber cuánto deben a sus jugadores y un plazo perentorio de 12 horas (que se cumplía ayer a las 8:00 p.m.) para dar una respuesta so pena de ser sancionados con la pérdida del reconocimiento deportivo, que lo imposibilitaría para seguir jugando en el torneo.


“El tiempo se agotó. El Gobierno Nacional y Coldeportes no van a permitir que los clubes no cumplan con el pago de salarios a sus jugadores y que falten con la seguridad social”, manifestó Jairo Clopatofsky, director de Coldeportes.


“No tengo plata ni para la gasolina de mi carro. Tengo que hablar con los jugadores para decirles que por el momento no tengo cómo pagarles”, fue lo que expresó Hernando Ángel, presidente y máximo accionista del Deportes Quindío, ante los plazos presentados por Coldeportes.
“Pero no será solo con el Quindío, esta obligación cobijará también los 18 equipos de la A y los 18 de la B”, insistió Clopatofsky.


Y es que son varios los clubes que viven una situación similar. La más difícil, la del Once Caldas, que adeuda cerca de 1.700 millones en salarios y premios. En el Deportivo Cali se le deben dos quincenas a los jugadores, que según los directivos serán canceladas cuando ingresen a las arcas del club los dineros provenientes de la venta del jugador Fabián Castillo, quien viajó a la MLS.


“Lo del pago de las obligaciones laborales con los jugadores no es un problema nuevo. Muchos de los clubes del fútbol rentado de nuestro país incumplen las normas consagradas y el hecho no es crear nuevas leyes si no hacen que las vigentes se cumplan”, dijo Carlos “Puche” González, director ejecutivo de la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro).


“En realidad son pocos los equipos que tienen deudas, tanto en lo laboral como en lo fiscal. Son más los que sí cumplen, entre otros, Atlético Nacional, Deportes Tolima, Equidad, Millonarios, Junior, Envigado, Huila y el mismo América, que ‘aparentemente’ se puso a paz y salvo con sus jugadores, se mantienen bien en cuanto a sus obligaciones”, expresó el máximo dirigente de Acolfutpro.


Pero lo más preocupante de la situación no es la misma crisis, si no sus causas, difíciles de solucionar. Es que hay varios males que están agobiando a nuestro fútbol. Las bajas taquillas, producto de diversos factores, como son la incapacidad económica de muchas personas, el ausentismo de otros por la creciente violencia en los estadios, la misma televisación de los partidos y el poco atractivo del mismo espectáculo sin figuras de gran seducción como otrora, así como también incide negativamente la no clasificación de los seleccionados mayores a los mundiales hace ya más de doce años.


Sin duda, una patología que hace difícil la cura para tan dura enfermedad.